Buenos Aires, Mayo 24 de 2005.-
Sr. Presidente de la Nación Argentina
Dr. Néstor Carlos Kirchner
Su Despacho
Con el mayor respeto nos dirigimos a Ud., a los
efectos de solicitarle arbitre las medidas para que se cumpla con
el espíritu de la Ley 23696/89 Art. 65 , Ley ésta sancionada
para legalizar las emisoras de FM en funcionamiento antes del 17
de agosto de 1989, facultando al poder ejecutivo para legalizar a
estas emisoras.
En tal sentido se dicta el decreto 1357/89
creando un registro de la totalidad de emisoras que totalizaron
casi 1500 en el país, unas 490 en la provincia de Buenos Aires de
las cuales 290 se encuentran en la zona denominada AMBA.
Posteriormente se dicta el decreto 1144/96 en
cuyos considerándoos reconoce la deuda que tiene el estado con
estas radios y se decide su legalización definitiva para lo cual
instruye a la Secretaria de Comunicaciones, emanándose la
resolución 142-SC/96.
Pese a los altos costos económicos que
significó para los radiodifusores cumplimentar los
requerimientos, estos se hicieron en tiempo y forma, pero una vez
más el estado entra en mora, en este caso tenemos la convicción
de que la mora se produce ex profeso al cambiar el cuadro
político, cuando la justicia impide que el ex presidente Menem
que sea nuevamente reelecto, éste dicta un nuevo decreto el
310/98 fundado en el 1144/96, creando los llamado a concurso y
habilitando de esta manera a los oligopolios de la comunicación
para que puedan participar de este concurso, dejando oportunidades
mínimas a los radiodifusores que motivaron la promulgación de la
Ley 23696 Art.65.
El decreto 310/98 nace plagado de violaciones a
la Constitución Nacional que se fueron modificando en el
transcurso del tiempo a medida que se iban interponiendo amparos
judiciales, resultando un esplendido negocio para el circulo
vicioso de funcionarios y abogados de radiodifusión, cuando en
realidad debería haber sido declarado de nulidad absoluta, por
que queda claro que es contradictorio al espíritu de la Ley
23696/98 que pretendía incluir en sistema a los radiodifusores y
no excluirlos para reemplazarlos por nuevos, pertenecientes al
oligopolio y amigos a los cuales le entregaron como pago a futuros
favores publicitarios para la campaña.
A la fecha el Estado Nacional continúa
otorgando licencias de baja y alta potencia mediante el
controvertido Decreto 310/98, sobre frecuencias autorizadas
previamente, sin haber notificado a los permisionarios ni
cancelado por causa alguna la habilitación precaria con la cual
fundaron sus empresas, violando de esta manera derechos
constitucionales y de pactos internacionales de rango superior.
Violación del Art. 4 del Decreto 1144/96
"Art. 4º - A fin de efectuar la asignación de
frecuencias y demás parámetros técnicos identificatorios de las
emisoras, la COMISION NACIONAL DE COMUNICACIONES tomará como
válidos los datos contenidos en los registros del COMITÉ FEDERAL
DE RADIODIFUSION y en su defecto, prevalecerán las asignaciones
oportunamente efectuadas por la COMISION NACIONAL DE
TELECOMUNICACIONES.
El COMITÉ FEDERAL DE RADIODIFUSION remitirá a
la COMISION NACIONAL DE COMUNICACIONES la nómina de emisoras que
se encuentren operativas y utilicen una determinada frecuencia en
virtud de decisiones judiciales firmes, sean cautelares o
definitivas".
El mencionado artículo deja en claro que
primero se deberían regularizar las emisoras del registro
1357/89, pero en definitiva el poder ejecutivo ha utilizado las
facultades conferidas por la Ley 23696/89 para otorgar por decreto
emisoras a la Iglesia Católica y Universidades sobre nuestras
frecuencias y licitar nuevas emisoras en alta potencia sin
necesidad racional alguna, limitando aún mas las posibilidades de
regularizar las emisoras por las cuales se promulgo la Ley. La
puesta en funcionamiento de estas nuevas radios ha producido
daños a esta altura irreparables.
Han transcurrido 17 años desde que comenzamos
esta lucha por nuestros legítimos derechos a la radiodifusión,
durante los cuales hemos recibido todo tipo de maltratos, que van
desde lo psicológico hasta lo económico con allanamientos y
decomiso de nuestros equipos, adquiridos a veces con la venta de
alguna propiedad o el ahorro de toda una vida de trabajo honrado.
El Año 1991 con la entrega de los permisos
precarios provisorios, creímos ilusamente haber entrado en el
sistema, al cabo de pocos años nos dimos cuenta que habíamos
entrado en el peor de los calvarios. Se nos comenzaron a exigir
todos los deberes, presentación de costosos estudios y carpetas
tendientes a nuestra definitiva regularización que nunca llegó y
como si fuera poco debemos soportar la permanente inseguridad de
nuestra permanencia en el aire. Al juzgar por los dichos de
algunos funcionarios que ya no están, se nos llego a decir
públicamente en un congreso que nuestros permisos estaban hasta
que ellos se levanten con un ataque de hígado.
Este gobierno nos ha tratado con mayor respeto
en cuanto a lo verbal se refiere, pero por otra parte a otorgado
emisoras sobre nuestras frecuencias autorizadas, sin notificación
alguna, sin tener en cuenta el daño ocasionado a familias enteras
que sobreviven de esta actividad, desconociendo nuestros
legítimos derechos adquiridos.
Distintos ha sido los mentirosos argumentos
para no otorgar nuestras licencias en estos casi 17 años, entre
ellos ha primado el de carácter legal de que a las licencias se
debe acceder por concurso público, mientras que si nos hubieran
otorgado las licencias, estarían ya próximas a vencer y quedar
en disponibilidad para concursar.
Mientras tanto los licenciatarios, este puñado
de empresas oligopólicas que recibieron la primera renovación
automática por los periodos ya vencidos de parte del gobierno de
la dictadura militar, en pago de los favores recibidos, por
desinformar al país de lo que en realidad sucedía (léase
informe de la CONADEP sobre el rol de los medios en la dictadura
militar) hoy son premiados nuevamente con este beneficio, que
impide que otros ciudadanos puedan aspirar a esas frecuencias,
siendo esta una situación repetida y que a muchos ya se les ha
pasado la vida esperando. Nos hace entender que no darnos las
licencias en forma automática y sin mas requisitos de los hasta
aquí cumplidos, esgrimiendo los derechos de otros actores a
participar, es nada mas que una vil mentira, un hecho
discriminatorio impulsado por quienes manejan el monopolio de la
información condicionando gobierno tras gobierno para que estos
les sean funcionales o viceversa.
Luego de 17 años probado está que estas
emisoras no han causado daño alguno al estado ni al oligopolio,
desde lo económico, ni desde lo técnico en el uso de las
frecuencias que tenemos autorizadas, ya que dentro del mayor área
conflictiva que se denomina AMBA se ha permitido por inacción u
omisión del estado, que sobre las 290 radios con PPP se instalen
unas 800 mas sin ningún tipo de autorización y algunas con
potencias iguales a emisoras categoría "A" las cuales
están activas desde hace mas de 7 años sin que sufran ningún
decomiso como estipula la Ley, situación por demás extraña, que
mas que situaciones de inacción u omisión , nos hacen pensar en
maniobras de corrupción.
Por lo cual solicitamos al Sr. Presidente:
1º) se congele todo tipo de autorización de
frecuencias en el espectro de 88 Mhz a 108 Mhz en las áreas
conflictivas hasta tanto no se resuelvan las licencias para los
radiodifusores con permiso precario.
2º) Haciendo uso de las facultades conferidas
por la Ley 23696 Art. 65 otorgar las licencias sin mas tramites a
los radiodifusores Autorizados desde el año 1989 de igual forma
como se Hizo con el credo Católico y Universidades y terminar con
esta situación de radiodifusores con deberes pero sin derechos,
al menos es lo que nos han hecho sentir y sufrir durante estos 17
años,
3°) Dar curso a un pedido ya solicitado a la
secretaria de Medios de la Nación para realizar un canje
publicitario con la AFIP a los fines de regularizar nuestra
situación de deuda con este organismo, generada debido a la grave
situación económica que paso el País y las constantes
interferencias de medios no autorizados que nos impiden trabajar y
consolidar nuestras pequeñas empresas.
4º) Integrar las emisoras de FM de baja
Potencia en el reparto de la publicidad oficial
Con la seguridad de que el Sr. Presidente
sabrá interpretar nuestro justo pedido, saludamos a vuestra
excelencia con la consideración más distinguida.-
Carlos A. Pizzi
Ignacio Lujan San Sebastián
Secretario
Presidente
Notas relacionadas:
FM
Amadeus contra las
"RADIOS PIRATAS"
FM
IDENTIDAD DENUNCIADA POR INTERFERENCIAS
LOS
PROBLEMAS DE LAS FM (Correo de Lectores)