constitucionalista asegura que el gobierno no podria declarar la
caducidad de las licencias del grupo clarin
27-SEP/2012
Lo afirmó Andrés Gil Domínguez, abogado y profesor de derecho
constitucional, en el marco del VII Encuentro Internacional de Banda Ancha y
Cable Módem, llevado a cabo ayer en el Salón Atlántico A del Hotel Hilton
Buenos Aires, quien participó de la conferencia “Regulación a la luz de la
constitución nacional. Análisis de los mercados” junto a Carlos Winograd.
Domínguez abrió su presentación y afirmó que “toda constitución
expresa un modelo en el que se debe establecer un marco de libertad de
acción de los ciudadanos, tanto en la economía como en la acción cotidiana”.
El jurista advirtió sobre la necesidad de sostener un tríptico inescindible:
libertad de expresión, derecho de propiedad y libertad de mercado. “En el
mercado audiovisual existen aspectos protegidos por la constitución. La
gestión individual establece que no debe haber una dependencia de la
publicidad oficial, si existiera tal dependencia, no habría libertad”.
En cuanto al Artículo 161 de la Ley 26.522 que exige el desprendimiento de
licencias, Gil Domínguez destacó ciertas incompatibilidades en términos de
la regulación de mercados. “El mandato del Art. 161 no se condice con la
Corte Interamericana de Derechos Humanos, ya que expresa, a grandes rasgos,
que las licencias existentes que excedan la cantidad estipulada deben
venderse de forma compulsiva o serán expropiadas, administradas y
concursadas por el Estado. Es aquí donde radica la principal contradicción”.
Gil Dominguez aseguró que si tras el plazo de un año que fija el artículo
161 el Grupo Clarín no se desprendió de las licencias, el Gobierno no podría
declarar la caducidad de las mismas.
Carlos Winograd, Paris School of Economics y Ex Secretario de Defensa de la
Competencia de Argentina, abrió su participación poniendo énfasis en dos
cuestiones que consideró claves: “La regulación va en contra de la evolución
y afecta a los más desposeídos”.
Continuó explicando que “en un país con fragilidad institucional como el
nuestro, la justicia actúa como un resguardo de ello, ante la ineficacia de
los organismos regulatorios. Esto quiere decir que como los reguladores no
son confiables, la justicia debe cumplir una doble función”.
Hoy en día, la tecnología funciona como una commoditie, la infraestructura
tomó la forma de una variable sin peso, ya que aumentaron las facilidades de
ingreso. En relación a esto, Winograd advierte que “el interrogante de los
contenidos aún no tiene respuesta, es un mundo que va cambiando y la
regulación debe cambiar y adaptarse a estas modificaciones”.
En el contexto del nivel de desarrollo actual, el multimedia aparece como
una de las posibles soluciones a un acceso masiva y a una creciente
producción de masas. “La regulación habla de diversificación,
democratización, y demás, pero lo único que sigue ocurriendo es que se crean
medios para pocos, y se destruye así la innovación, el acceso igualitario y
la competencia”, expresó Winograd.
“Si el Estado limita las licencias de cable estaría afectando directamente
los costos de producción de internet, y esta situación repercutirá
directamente en el usuario, tanto en sus posibilidades de consumo como de
participación”, cerró Winograd.
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