Denuncian que regulación de medios en
Latinoamérica se aparta de DD.HH.
23-NOV/2012
Latinoamérica es
una región que está llena de "ejemplos vivientes" de
regulaciones que se apartan de la defensa de los derechos
humanos en materia de medios y libertad de expresión, según
denunció hoy (miércoles 21) Luis Pardo, presidente de la
Asociación Internacional de Radiodifusión (AIR).
El responsable de
la mayor organización mundial de medios privados de radio y
televisión señaló que las "leyes de medios" que en los últimos
años han surgido en diversos países de América Latina se
"apartan de los marcos doctrinarios internacionales" que regulan
a los medios de comunicación y "abusan y flexibilizan las
limitaciones" que existen a las libertades de expresión y de
prensa.
Pardo se expresó así en Montevideo durante su participación en
el seminario "Los desafíos de la comunicación en América
Latina", en donde especialistas de toda la región hablaron de
los aspectos económicos, sociales, técnicos y políticos que
afectan a prensa en la actualidad.
"En la región, estas leyes de medios tienen un padrón común, que
incursiona y va más allá de las restricciones legítimas para los
medios (...) Se configuran disposiciones normativas que bajo
pretextos o intenciones que incluso suenan muy loables, terminan
por generar una capacidad de la autoridad de turno para influir
sobre los medios y de esa forma evitar la crítica", indicó.
Pardo indicó que la regulación de la prensa y la televisión se
da o bien para asegurar y mejorar el libre flujo de las ideas o
para restringirlo e influir sobre él de alguna manera.
Según señaló, los medios ya están regulados por las normas
generales y comunes que rigen toda actividad económica, una
situación que es empleada "por determinados gobiernos para
influir en la línea editorial de los medios".
Así, Pardo criticó que se empleen normas antimonopolio
específicas para los medios de comunicación.
"Se generan discursos que justifican modificaciones que se
apartan de la racionalidad económica con la que se legisla en
todos los ámbitos y se introducen normas con nombre y apellidos
para destruir determinados medios. Y eso altera el principio
general de la regulación económica de los medios", añadió.
Otras normas que influyen en la prensa son las que establecen
otros derechos, como el de la honra y el buen nombre, así como
las que regulan el espacio radioeléctrico, cuya normativa
debería estar inspirada en los tratados internacionales que hay
al respecto.
"El único caso permitido de censura por las regulaciones
internacionales es la protección de la adolescencia y la
infancia, que en realidad se limita a reglar el acceso a
espectáculos públicos nocivos. Todo lo demás queda regulado por
las responsabilidades ulteriores, que deben estar expresamente
fijadas en la ley", recordó.
Precisamente, en cuanto a estas responsabilidades, Pardo apuntó
que solo se debería regular lo que afecta a terceros, como las
injurias y calumnias, que además deberían ser específicamente
detalladas en la ley.
Otros argumentos para limitar estos derechos, como el orden
público, "no pueden esgrimirse para suprimir otros bienes
jurídicos como la expresión", culminó.
Fuente: EFE
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